La llamada Escala Bartel (o también conocida como “Barthel Test” o “Escala BVD de dependencia”) es un instrumento creado por dos doctores, llamados Barthel y Mahoney, en un hospital americano en el año 1955.
Diseñada y utilizada para la evaluación del grado de dependencia existente en las personas mayores, dicha herramienta sigue siendo muy utilizada hoy en día en el mundo del cuidado de las personas mayores, gracias a su eficacia. Pero, ¿Cómo puede ayudar la escala de dependencia de barthel, en realidad, a un paciente dependiente?
Escala de Barthel que mide y que características tiene
Una vez que ya sabemos que es el índice de Barthel, debemos pasar a la clasificación de las actividades básicas de la vida diaria que comprende. Así, la Escala de Barthel contempla diez actividades concretas capaces de medir el grado exacto de funcionamiento físico y psicomotor del paciente, que son:
- Movilidad o deambulación. Ser capaz de caminar 50 metros o de moverse de manera independiente sin ayuda de apoyos (bastones o sillas de ruedas) o de otras pers
- Grado de alimentación. Capacidad de la persona, o no, de comer por sí misma y en un tiempo adecuado.
- Motilidad intestinal. Nivel de control de los movimientos intestinales y de las defecaciones, número de accidentes ocasionales o necesidad de supositorios o enemas.
- Control urinario. Nivel de autonomía o incontinencia en la micción, frecuencia de accidentes o uso de ayudas externas tipo sondas.
- Uso del inodoro. Capacidad de utilizar el inodoro, incluyendo la limpieza y el aseo propio, sin ayuda de otras personas.
- Manejo en el vestir. Ser capaz de quitarse y ponerse la ropa adecuadamente, sin ayuda y en un tiempo razonable.
- Aseo personal. Capacidad de cumplir con las actividades de arreglo y aseo personal sin ayuda.
- Uso de escaleras. Nivel de autonomía a la hora de subir y bajar escaleras de manera segura y sin ayuda.
- Movilidad y transferencias. Ser capaz de moverse a la cama o a un sillón sin problemas, a una silla de ruedas sin ayuda…etc.
Cómo calcular el Barthel Test correctamente
En primer lugar, el profesional encargado de la realización del test deberá determinar el grado de desempeño del paciente en cada una de esas actividades, según una escala de puntuación de 0 a 100 (“Barthel Escala de Puntuación”), en la que el 0 representa una dependencia absoluta y el 100 una independencia total en las rutinas del día a día, cifra que bajaría hasta 90 en el caso de uso de silla de ruedas.
Una vez obtenidas todas las puntuaciones (que deberán ponerse en tandas de 0, 5, 10 o 15, según sea el caso) se determinará la puntuación total obtenida y el grado de dependencia funcional o no de la persona, pudiendo alegarse una dependencia grave o total (resultado inferior a 20 puntos), de tipo moderado (resultados de 40 a 50 puntos), nula (resultado de 100 puntos) o tan solo leve o parcial (resultado de 60 puntos o más). Así, por ejemplo, si nos encontramos con un índice de Barthel con puntuación de 60, nos encontraremos ante un paciente todavía capaz de hacer la mayor parte de sus actividades diarias de manera autónoma.
Ventajas de utilizar la Escala de Barthel con personas mayores
Este método ofrece numerosas ventajas en el cuidado de las personas mayores, como la posibilidad de evaluar las capacidades de la persona a lo largo del tiempo y siguiendo unos patrones concretos, objetivos y estandarizados, poder tener información detallada sobre los cuidados requeridos y personalizarlos al paciente…etcétera.
A su vez, la escala de Barthel permite también una mejor comunicación entre los profesionales de la salud y los pacientes y sus familias, pudiendo informar en cualquier momento sobre la necesidad de una atención integral al anciano o sobre las posibilidades del paciente de seguir siendo independiente, o de tener algún tipo de asistencia domiciliaria conforme a su capacidad funcional real.
Servicios de cuidado a domicilio para mayores
En definitiva, la conocida como Escala de Barthel es un método esencial para muchos fisioterapeutas, médicos, u otros profesionales de la salud y de la geriatría como es el caso de los cuidadores de personas mayores en el hogar, pues permite establecer de forma clara qué tipo de atenciones se necesitan para favorecer la autonomía del anciano, en la medida de lo posible, y para mejorar al máximo su nivel de calidad de vida.
Además, otro de sus beneficios más importantes es el de poder averiguar si la persona mayor puede seguir viviendo sola o no, o si tan solo necesita un sistema de cuidado de personas mayores por horas como el que ofrecemos en Cuidum Servicios, para hacer posible que la vida del adulto mayor se vea lo menos perjudicada posible, aunque ya no tenga la misma capacidad funcional.
Por eso, y conscientes de lo importante que es para una persona mayor el poder seguir al lado de su familia, contamos con cuidadoras que garantizan cuidados individualizados y adaptados a las necesidades específicas de tu familiar anciano.