Las lluvias torrenciales y las inundaciones provocadas por la DANA en Valencia han dejado una huella devastadora. Un dato que ha generado especial preocupación es que más de la mitad de los fallecidos en estos sucesos eran personas mayores.
Esta trágica realidad pone de manifiesto la vulnerabilidad de este colectivo ante emergencias climáticas extremas y la necesidad urgente de implementar medidas de prevención y asistencia específica para ellos.
¿Cómo afectó la Dana a los adultos mayores?
La DANA en Valencia afectó de manera desproporcionada a los adultos mayores. Según datos proporcionados por el Consejo General del Poder Judicial, se confirmó que la mayoría de las víctimas mortales eran mayores de 70 años. Esta cifra alarmante revela que los mayores fueron el grupo más vulnerable durante esta catástrofe natural.
La falta de movilidad y las condiciones de salud asociadas con la edad jugaron un papel determinante en esta situación. Muchas de las personas mayores afectadas residían en zonas de alta peligrosidad y se vieron incapaces de evacuar a tiempo. Además, el desconocimiento de los protocolos de emergencia y la falta de información inmediata agravaron su situación.
Uno de los casos más alarmantes fue el de unos mayores que vivían en una residencia de personas mayores. Específicamente, en la Residencia Savia Paiporta, donde se vivieron momentos críticos durante el temporal, poniendo en evidencia la necesidad de mejorar los planes de evacuación en estos centros.
Por otro lado, el aislamiento social incrementó el riesgo. Muchas personas mayores vivían solas y no contaban con una red de apoyo que pudiera ayudarlas en una situación crítica. Esta falta de asistencia inmediata fue desfavorecedora en algunos casos, ya que el tiempo de respuesta durante una emergencia es crucial.
El Consejo Estatal de las Personas Mayores, en un manifiesto emitido por el IMSERSO, subrayó la importancia de reforzar las medidas de prevención y asistencia específica para este colectivo. La necesidad de protocolos claros y adaptados para proteger a los mayores en situaciones de riesgo se ha hecho evidente.
Factores de riesgo en el hogar durante una DANA
Existen diversos factores que hacen que las personas mayores enfrenten mayores riesgos durante una DANA. La movilidad reducida puede limitar su capacidad para abandonar sus hogares con rapidez, mientras que las enfermedades crónicas pueden agravar su situación. Además, muchos mayores dependen de dispositivos médicos eléctricos que pueden dejar de funcionar durante un corte de energía.
Es por eso que durante una DANA, el hogar de una persona mayor puede transformarse en un espacio lleno de riesgos. Las inundaciones por la DANA pueden hacer que las viviendas se conviertan en trampas mortales si no se toman medidas adecuadas. A continuación te explicamos algunos de los principales riesgos en el hogar durante una DANA:
- Inundación rápida: El agua puede subir de manera inesperada, atrapando a las personas mayores en habitaciones sin salida.
- Cortes de energía: La falta de electricidad afecta el funcionamiento de dispositivos médicos y sistemas de comunicación.
- Barreras arquitectónicas: Escaleras, desniveles y puertas estrechas dificultan la evacuación rápida.
- Objetos caídos y resbalones: Las inundaciones pueden provocar la caída de muebles y electrodomésticos, aumentando el riesgo de accidentes.
La vulnerabilidad de las personas mayores durante una DANA requiere que se implementen medidas de prevención específicas. Es fundamental adaptar los hogares para que sean accesibles a las personas con movilidad reducida. Teniendo en cuenta estos riesgos es vital poder realizar ajustes con antelación como la instalación de rampas y pasamanos, eliminar alfombras que puedan causar resbalones y garantizar que todos los accesos estén despejados puede salvar vidas.
La importancia de la asistencia domiciliaria a mayores
Contar con asistencia domiciliaria es una de las medidas más efectivas para proteger a las personas mayores durante una DANA en Valencia. Los cuidadores a domicilio no solo ofrecen apoyo diario, sino que también pueden desempeñar un papel crucial durante emergencias. Un cuidador de personas mayores puede ayudar a implementar un plan de emergencia personalizado, garantizando que la persona mayor esté preparada para actuar rápidamente.
La asistencia domiciliaria permite que los mayores reciban información actualizada sobre las alertas meteorológicas y los protocolos de evacuación. Además, un cuidador puede ayudar en tareas como:
Incluyendo medicinas, alimentos no perecederos y dispositivos de comunicación.
Ayudando a la persona mayor a salir de su hogar de forma segura.
Garantizando que los familiares estén informados de la situación en todo momento.
El cuidado a domicilio no solo proporciona apoyo físico, sino también emocional, reduciendo la ansiedad y el miedo que pueden experimentar los mayores durante una emergencia. Este tipo de asistencia asegura que los mayores estén acompañados y bien cuidados, incluso en situaciones tan complicadas como una DANA en Valencia.
Nuestro compromiso con el cuidado y el bienestar en el hogar
En Cuidum, nos dedicamos a garantizar el bienestar personas mayores y su seguridad en el hogar. Sabemos que el cuidado domiciliario es fundamental para proteger a este colectivo vulnerable, especialmente en situaciones de emergencia como una DANA. Nuestros cuidadores están formados para actuar de manera eficiente y brindar apoyo integral a los mayores y sus familias.
Nos esforzamos por evaluar las necesidades individuales de cada persona mayor y adaptar sus hogares para minimizar los riesgos. La comunicación constante con las familias y los servicios de emergencia es esencial para asegurar una respuesta rápida y eficaz. La seguridad para personas mayores es una responsabilidad compartida. Con el apoyo adecuado y medidas preventivas, podemos garantizar que nuestros mayores estén protegidos y seguros en sus hogares, incluso durante una DANA.