El gobierno ha aprobado un nuevo Real Decreto 893/2024 donde se recoge los nuevos derechos de las empleadas del hogar en materia de prevención de riesgos laborales, marcando un avance significativo en la protección y dignificación de un sector esencial para la asistencia domiciliaria.
Esta normativa, orientada a mejorar las condiciones laborales y de seguridad para las empleadas del hogar, establece un marco más robusto para enfrentar los riesgos asociados al trabajo en el ámbito doméstico.
A partir de 2026, y con un periodo de implementación gradual, se introducirán medidas clave como evaluaciones de riesgos laborales, formación en prevención y reconocimientos médicos periódicos.
Esta ley no solo busca proteger la salud y el bienestar de las trabajadoras, sino también asegurar que las familias cumplan con sus responsabilidades como empleadores.
¿Qué es el plan de prevención de riesgos laborales para empleadas de hogar?
El plan de prevención de riesgos laborales para empleadas de hogar es una normativa reciente diseñada para mejorar la seguridad y las condiciones de trabajo en el ámbito doméstico. Este plan establece un sistema integral para identificar, evaluar y gestionar los riesgos que enfrentan las empleadas del hogar.
El plan busca garantizar un entorno laboral más seguro para las empleadas del hogar, que a menudo enfrentan riesgos sin la protección adecuada. Con la implementación de esta normativa, se pretende mejorar las condiciones de trabajo y asegurar que las familias empleadoras asuman sus responsabilidades para con sus trabajadoras.
¿Cuáles son los objetivos de la prevención de riesgos laborales para empleadas del hogar?
El objetivo principal de la prevención de riesgos laborales para empleadas del hogar es garantizar la seguridad y salud de las trabajadoras en un entorno doméstico que, a menudo, presenta desafíos y riesgos específicos.
Reducción de accidentes y enfermedades: Minimizar la incidencia de accidentes y problemas de salud relacionados con el trabajo mediante la identificación y gestión adecuada de los riesgos en el hogar. Esto incluye desde caídas y lesiones físicas hasta problemas de salud derivados de condiciones laborales inadecuadas.
Protección integral de la salud: Asegurar que las empleadas del hogar reciban un cuidado adecuado mediante exámenes médicos regulares y la provisión de equipos de protección. La normativa busca prevenir tanto las lesiones físicas como los problemas de salud a largo plazo.
Concienciación y capacitación: Brindar formación específica en prevención de riesgos para que las trabajadoras puedan reconocer y actuar frente a situaciones potencialmente peligrosas. La capacitación también ayuda a fomentar una cultura de seguridad y autocuidado.
Cumplimiento de derechos laborales: Asegurar que las familias que emplean a trabajadoras del hogar cumplan con sus obligaciones legales, promoviendo un entorno laboral más justo y equitativo. Esto incluye la provisión de equipos de protección y el cumplimiento de normativas de seguridad.
Promoción de un entorno de trabajo seguro: Crear un entorno laboral en el hogar que sea seguro y saludable, reduciendo el riesgo de accidentes y garantizando el bienestar general de las empleadas. La normativa también pretende facilitar la comunicación y la resolución de problemas relacionados con la seguridad.
Prevención riesgos laborales empleadas hogar, ¿qué incluye la nueva normativa?
La nueva normativa sobre prevención de riesgos laborales para empleadas del hogar introduce un marco integral de medidas para mejorar la seguridad y las condiciones de trabajo en el entorno doméstico. A continuación se detallan los principales aspectos:
Evaluación de riesgos laborales
Los empleadores están obligados a realizar una evaluación inicial de los riesgos en el hogar donde las empleadas desempeñan sus funciones. Esta evaluación debe identificar todos los posibles peligros, desde caídas y resbalones hasta riesgos ergonómicos y químicos.
La evaluación de riesgos debe actualizarse periódicamente y siempre que haya cambios significativos en el entorno laboral, como renovaciones en el hogar o cambios en las tareas realizadas.
Se dispondrá de una herramienta online gratuita, proporcionada por el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST), que permitirá realizar las evaluaciones de riesgos laborales en los hogares de manera más accesible para las familias. Este recurso será clave para cumplir con la obligación de identificar los peligros en el entorno doméstico.
Reconocimiento médico gratuito
Las empleadas del hogar tendrán derecho a un reconocimiento médico gratuito cada tres años. Este chequeo tiene como objetivo detectar y prevenir problemas de salud relacionados con el trabajo.
Los exámenes médicos se realizarán con estrictas garantías de privacidad y respeto a la intimidad de las trabajadoras.
Formación en prevención de riesgos laborales
Al momento de contratar a una cuidadora o empleada del hogar, se proporcionará formación en prevención de riesgos. Si las empleadas trabajan en múltiples domicilios o en lugares con riesgos excepcionales, se ofrecerá formación complementaria específica para esos casos.
La formación se impartirá a través de una plataforma gestionada por la Fundación Estatal para la Formación en el Empleo (Fundae). El tiempo dedicado a esta formación se considerará como parte de la jornada laboral y será compensado adecuadamente.
Provisión y mantenimiento de equipos de protección
Las familias empleadoras deberán proporcionar a las empleadas equipos de protección adecuados para realizar sus tareas de manera segura. Estos equipos incluirán, por ejemplo, guantes, mascarillas y calzado antideslizante, según lo requiera el riesgo identificado.
Los equipos de protección deberán ser reemplazados cuando se desgasten o se vuelvan inadecuados para garantizar su efectividad continua.
Prevención de violencia y acoso
Se establecerán protocolos específicos para la prevención y gestión de situaciones de violencia y acoso en el ámbito laboral doméstico.
Estos protocolos deben ser desarrollados y implementados en el plazo de un año desde la entrada en vigor de la normativa.
Derecho a paralizar la actividad
Las empleadas del hogar tendrán el derecho a interrumpir su actividad si consideran que existe un riesgo grave e inminente para su salud o seguridad.
Este derecho asegura que puedan abandonar la situación peligrosa sin perjuicio para su empleo, siempre que no actúen de mala fe o cometan negligencia grave.
Esta normativa integral busca no solo mejorar la protección y bienestar de las empleadas del hogar, sino también fomentar un entorno laboral más seguro y justo, donde se respeten y cumplan los derechos y responsabilidades tanto de empleadores como de trabajadoras.
Ley de prevención de riesgos laborales: Impacto en familias y cuidadoras
La reciente aprobación marca un hito importante en la mejora de las condiciones laborales de este colectivo. Esta normativa introduce cambios significativos que afectarán tanto a las familias empleadoras que contratan estos servicios como a las cuidadoras y empleadas del hogar que prestan su trabajo en los domicilios. Su implementación traerá consigo una serie de beneficios y responsabilidades que transformarán la manera en que se gestiona la seguridad y el bienestar en el entorno doméstico.
Beneficios para las cuidadoras:
Las cuidadoras se beneficiarán de un entorno laboral más protegido y justo. La ley introduce derechos como el acceso a reconocimientos médicos periódicos, la formación en prevención de riesgos y la capacidad de interrumpir actividades peligrosas sin temor a represalias.
- Reducción de accidentes: La evaluación de riesgos y la provisión de equipos de protección adecuados contribuyen a disminuir la frecuencia de accidentes y enfermedades relacionadas con el trabajo doméstico.
- Reconocimientos médicos periódicos: El derecho a chequeos médicos gratuitos cada tres años permite la detección temprana de problemas de salud, asegurando un ambiente de trabajo más seguro y saludable.
- Capacitación en prevención: La formación en prevención de riesgos dota a las cuidadoras de los conocimientos necesarios para identificar y gestionar peligros potenciales, mejorando su capacidad para trabajar de manera segura.
- Protección en situaciones de riesgo: El derecho a parar el trabajo en caso de riesgos graves e inminentes, sin temor a repercusiones negativas, asegura que las cuidadoras puedan actuar en defensa de su propia seguridad sin comprometer su empleo.
Responsabilidad para los empleadores:
Para las familias empleadoras, la ley implica un compromiso renovado con la seguridad y la salud de las trabajadoras. Las nuevas obligaciones incluyen la realización de evaluaciones de riesgos en los hogares, la provisión de equipos de protección adecuados y la implementación de protocolos para prevenir situaciones de violencia y acoso.
- Realización de evaluaciones: Las familias que contratan empleadas del hogar deben llevar a cabo evaluaciones de riesgos en sus domicilios, identificando y mitigando posibles peligros para garantizar un entorno seguro. La obligación de actualizar las evaluaciones de riesgos y proporcionar equipos de protección adecuados recae sobre las familias, asegurando que el entorno de trabajo se mantenga seguro a lo largo del tiempo.
- Provisión de equipos y materiales adecuados: Las familias deben proporcionar todos los equipos de protección necesarios sin coste para las trabajadoras, incluyendo elementos como guantes, Las familias tienen la responsabilidad de mantener estos equipos en buen estado y reemplazarlos cuando sea necesario, garantizando que las cuidadoras siempre cuenten con la protección adecuada.
- Prevención de violencia y acoso: Las familias deberán implementar y seguir protocolos para la prevención y gestión de situaciones de violencia y acoso, protegiendo a las trabajadoras de cualquier forma de abuso o maltrato en el entorno doméstico.
- Facilitación de formación: Deben asegurar que las cuidadoras tengan acceso a la formación en prevención de riesgos y facilitar el tiempo necesario para su realización, ya sea durante o fuera de la jornada laboral, pero siempre compensada adecuadamente.
Esta normativa no solo refuerza la protección de las trabajadoras, sino que también fomenta la profesionalización del sector, reconociendo la importancia de un entorno de trabajo seguro y justo. Como especialistas en asistencia domiciliaria, en Cuidum nos comprometemos a seguir apoyando tanto a las familias como a las cuidadoras, asegurando que se cumplan todas las normativas y que la calidad del servicio se mantenga siempre en los más altos estándares.
Queremos destacar que la implementación de esta normativa se llevará a cabo de forma gradual. Nos encargaremos de informar a las familias contratantes con antelación sobre cada etapa de la implementación, garantizando que tanto las familias como las trabajadoras se adapten adecuadamente a los nuevos requisitos.