Los mayores que viven en soledad lo tienen difícil. La actual sociedad parece no tener tiempo para su cuidado, algo que se suma al cambio de costumbres y a la perdida de sus allegados provocando una sensación de tristeza que hay que atajar cuanto antes para que no derive en problemas más graves.
La tristeza: un problema más grave de lo que se piensa
Los expertos están de acuerdo en que las personas mayores necesitan mantener estrechas relaciones sociales tanto con sus familiares como con la comunidad a la que pertenece. Esta es la única forma de conseguir una vejez tranquila y de alejar el fantasma de enfermedades que acortarán la vida y le restarán calidad.
Es más, aquellas personas que se sienten solas son proclives a desarrollar problemas muy serios. Sin ir más lejos, la tristeza comenzará a hacerse patente en el día a día convirtiéndose en la fuente de situaciones como el aislamiento social e incluso del miedo a salir a la calle o a emprender nuevas actividades que podrían estimular sus horizontes.
Queda claro entonces que un mayor no puede estar solo y menos estar triste. Visitarlo una o dos veces por semana no es solución alguna, y es que es la actividad diaria y las relaciones cotidianas las que fortalecen el bienestar de nuestros mayores.
Algunas consecuencias de estar triste
El abatimiento o la angustia que se generan por situaciones como el estar solos es algo de lo más problemático.
Recientes estudios han demostrado que este sentimiento puede comenzar a provocar pautas de conducta inadecuadas. El anciano que se siente triste se vuelve más huraño y menos social, por lo que el aislamiento y la falta de motivaciones en el día a día se exagerarán de forma preocupante.
Esta situación será el desencadenante de otras aún peores. Sin ir más lejos, la depresión aparece al poco tiempo de comprobar que existe ese sentimiento de abatimiento, siendo esta ya una realidad difícil de superar.
Pero el decaimiento suele dar paso a problemas de angustia social y emocional. Estas afectan de forma muy seria a la salud física de los ancianos, y es que la persona mayor que tienes cerca y que siente angustiada está expuesta a infartos o a patologías degenerativas como el Alzheimer o la demencia.
En muchos casos habrás pensado que la pena es algo pasajero y que basta con hacer que nuestros mayores disfruten de momentos divertidos, aunque la realidad es que es algo mucho más preocupante que debe tomarse muy en serio.
La ayuda de Triangle
Buena parte de todos estos problemas pueden ser solucionados con Triangle. Se apoya en la compañía física, y es que un cuidador experto pasará tiempo con ese mayor que tanto nos ha dado para que pueda conversar, salir a hacer la compra o afrontar todas las tareas del día a día sin el menor problema.
Triangle integra a su vez un nuevo sistema aporta una vigilancia activa de nuestros mayores mediante la teleasistencia inteligente con la que estos se sentirán siempre protegidos. Si sufren alguna caída estando solos o sus movimientos no son normales, el sistema envía una alerta para que alguien pase a ver a la persona.
2 comentarios
muy bueno que enseñanza llevo tiempo solo la verdad si he sentido depresion y muchas otras cosas
Hola Luis,
Recuerda que en esta vida no estamos solos. Siempre contaremos con personas a nuestro alrededor dispuestas a ayudarnos y darnos una mano en situaciones difíciles, como también centros especializados en tratar situaciones difíciles de tratar solos. Lo realmente importante es tomarlo como un aprendizaje y saberlo sobrellevar.
¡Te deseo un buen día!